Cuando Marijaia sale al balcón del teatro Arriaga, Bilbao es pura fiesta. Porque los bilbaínos celebran a lo grande su Aste Nagusia durante 9 días de agosto a base de conciertos, bailes, deporte, tradición y mucho más.
Origen de la Aste Nagusia de Bilbao
Todo empezó en agosto de 1973, cuando unos grandes almacenes organizaron en Bilbao la“I Semana de Deporte Rural Vasco”, con exhibiciones gratuitas de Herri Kirolak de los mejores deportistas del momento. Al público le entusiasmó y en ese momento quedó en el aire que sería buena idea intentar acercar las fiestas a la gente, aunque no llegó a materializarse en nada concreto.
Unos años más tarde, ya en 1977, Zorion Eguileor, periodista y locutor de radio, lanzó desde su programa la idea de unas fiestas populares y participativas y vaya si respondieron los bilbaínos. Unas 5.000 personas se lanzaron a la calle rebosando ganas de pasárselo bien en la que sería la primera kalejira multitudinaria.
Fiestas de Bilbao
El Ayuntamiento de Bilbao tomó nota de ello y ese mismo año planteó un concurso de ideas “Hagamos populares las Fiestas de Bilbao”. El objetivo queda claro ya en el prólogo: “Somos los propios bilbaínos quienes debemos aportar, sugerir, las ideas realizables de unos festejos eminentemente populares, que satisfagan a las gentes de nuestros barrios, a la comunidad toda de los vecinos de Bilbao y que respondan a la expresión más sincera de conseguir, entre todos, hacer un Bilbao mejor”.
Por cierto, la creatividad tenía premio, ya que la iniciativa ganadora recibiría 100.000 pesetas de la época. Hubo 37 participantes y un empate final, con polémica incluida, pero Txomin Barullo se alzó con el primer premio.
Comparsas en la Aste Nagusia
1978 se convirtió entonces en el primer año en que se celebró la Aste Nagusia, gracias a la descomunal tarea de organización realizada por los miembros de las recién creadas comparsas, surgidas a partir de comisiones por barrios con su propia fanfarria y un mínimo de 50 integrantes vestidos con el mismo traje.
Los Gigantes y Gargantúa en Bilbao
Una de sus primeras acciones fue recuperar dos de las tradiciones más antiguas, la de los Gigantes, del siglo XVI, y al popular Gargantúa.
Como no se conservaba ninguno de ellos en buen estado, el propio ayuntamiento cedió algunos Gigantes. Hasta los Carnavales de 1980 no se presentarían los 12 Gigantes habituales: Don Terencio y Doña Tomasa; El aldeano y la aldeana; El Inglés y La Bilbainita; El Minero y La Cigarrera; La Carguera y El Marino; y Zumalakarregi e Isabel II.
Tampoco estaba en buena forma forma la figura de Gargantúa, quien ya en 1854 andaba tragándose a los niños y niñas bilbaínos/as. Pero ya para la Aste Nagusia de 1979 se pudo contar con un Gargantúa reconstruido por Cómicos de la Legua.
Como curiosidad, hoy ya no es tan “tragón”, ya que en su interior hay un tobogán que permite a los niños/as salir por la parte trasera.
Ya solo faltaba Marijaia ;)
¿Quién es Marijaia?
Toda fiesta necesita un símbolo. Ese personaje querido, y a veces odiado, al que identificamos con la fiesta solo con verlo. Así que la Aste Nagusia necesitaba el suyo.
A solo cinco días del inicio de la fiesta, la pintora Mari Puri Herrero recibió el encargo de hacer un muñeco que sirviese como seña de identidad. La base sería la dama de Anboto.
Y así nació Marijaia, una mujer de cuatro metros de altura, vestido colorido, sonrisa eterna y brazos en alto en actitud festiva y maternal. Si te preguntas por qué sus manos están alzadas, la respuesta es que se trata de una señal de optimismo y una representación de que baila, como no podía ser de otra manera en plena fiesta.
Sin ella no hay fiesta, así que su quema representa el punto final de la Aste Nagusia cada año.
Consolidación y actualidad de la Aste Nagusia
Ya no hay vuelta atrás. A partir de ahí, la fiesta se consolida y se reinventa cada año desde aquel primer txupinazo en la tarde del 19 de agosto de 1978.
Este año, por ejemplo, en la agenda de conciertos podremos disfrutar de la BilbokoOrkestra Sinfonikoa, de Victor Manuel, El Drogas, Viva Suecia, La Oreja de Van Gogh, Bulego, Dani Fernández, Pasión Vega o Ana Mena, entre otros.
Txosnas
Por otro lado, las calles de Bilbao durante las fiestas se llenan de las llamadas “txosnas” (casetas con música, comida y bebida). Hay música, baile y las comparsas amenizan cada rincón, se celebran corridas de toros y vaquillas y se realizan competiciones de fuegos artificiales.
El deporte también tiene su espacio propio con exhibiciones y campeonatos de deportes rurales tan nuestros como cortar troncos o arrastrar piedras.
Así que ya solo nos queda decir. Gora Marijaia!