Las redes sociales se han convertido en un buen altavoz para hacer llegar tu mensaje a un gran número de usuarios. Y para que la presencia en estas redes sea provechosa y eficaz, conviene definir unos objetivos y una estrategia clara.

Lo primero es pensar qué redes son las más apropiadas para vuestra empresa, por el tipo de producto o servicio, en función del público al que se dirige... teniendo en cuenta, además, los recursos de los que disponéis para atenderlas. Sed realistas a la hora de plantearos en cuántas redes váis a estar presentes y el número y frecuencia de publicaciones previstas. Si tenéis éxito, vuestra comunidad crecerá y cada vez habrá más interacciones, lo cual implicará mayor dedicación y una estrategia de atención al cliente más elaborada.

A día de hoy existen innumerables opciones. Redes como Twitch, Reddit o TikTok tienen su propio espacio pero en esta ocasión vamos a centrarnos en las más conocidas y con mayor número de usuarios.

Facebook. Es una de las redes más reconocidas. ¿Perfil o Página? Los perfiles están pensados para conectar con amigos. Pero si tenéis una empresa, es mejor optar por crear una página, también gratuita, en la que mostrar tu negocio y sumar tantos fans como quieras. Además, las páginas te ofrecen reportes con interesante información acerca de tus potenciales clientes, como la edad o su localización.

Instagram. Es la red más visual, una plataforma ideal para dar mayor visibilidad a tus productos o servicios a través de imágenes. Sus reels de Instagram, que son clips de hasta 60 segundos de vídeo, con los efectos y filtros que quieras, son contenidos muy atrayentes y compartidos por los usuarios.

Twitter. Su principales valores radican en la inmediatez y en la brevedad que impone la limitación de 280 caracteres. Es el lugar perfecto para que las marcas lancéis productos nuevos y estéis informadas en tiempo real de lo que está pasando en el mundo y de las tendencias más recientes.

Youtube. A este sitio web ideado para compartir vídeos se suben cada día millones de contenidos. Para una empresa, disponer de un canal propio es una forma de forjarse una identidad y una reputación digital. Además, puede ayudaros a mejorar el posicionamiento SEO de vuestros productos y servicios e incluso podréis publicitar vuestro negocio implementando anuncios en el canal.

Linkedin. Esta red social está centrada en el ámbito profesional y empresarial. Además de posicionar vuestra marca, da conexión directa con proveedores y posibles clientes y funciona como una fantástica herramienta para localizar talento y encontrar perfiles profesionales.

Independientemente de la red o redes que elijáis para vuestra estrategia de marketing digital, prestad especial atención a:

  • El contenido que publicáis. Conciso, breve, original, visualmente atractivo o incluso en formato vídeo, el preferido por los usuarios y cuyo consumo tiende claramente al alza.
  • El tono. Hay que adaptarlo a los usos de cada red social. En general, coloquial y amigable (más formal en Linkedin), directo pero correcto, sin entrar en descalificaciones o batallas dialécticas que, casi sin daros cuenta, os alejen de la línea corporativa de vuestra empresa.
  • Interacción. Llamad a la participación activa de los usuarios e incluid llamadas directas a la acción. Los concursos, sorteos y encuestas son una forma muy eficaz de captar la atención y sondear a potenciales clientes.
  • Explorad todas sus posibilidades. No os conforméis con publicar contenidos. Las redes sociales pueden convertirse en un fluido centro de atención digital al cliente, en una plataforma de venta o en un dinámico escaparate publicitario, ya que muchas de ellas te dan la posiblidad de insertar anuncios.

Las redes sociales son una herramienta indispensable en una sociedad digital habituada a comunicarse y a relacionarse de forma fluida y rápida a través de diferentes dispositivos, tiempos y localizaciones. Una estrategia adecuada por parte de vuestra empresa redundará en mayor visibilidad, incremento de ventas y mejora de la rentabilidad.